El ‘speedwatching’ es una tendencia que consiste en consumir contenido audiovisual en plataformas digitales a una velocidad más rápida de la que fue producido, con el fin de ahorrar tiempo y no perderse nada de lo que ocurre en la red.
Sin embargo, diversos estudios científicos han comprobado que este hábito puede tener consecuencias negativas para la capacidad de atención y comprensión de los adolescentes y jóvenes, pero también genera un tipo de ansiedad social denominada FOMO, señala un artículo publicado en la revista The Conversation.
La estimulación rápida y permanente que proporciona esta nueva tendencia genera una gratificación en el cerebro y no requiere tanto esfuerzo mental, pero a medida que esto se hace costumbre en la cotidianidad se va recortando capacidad atencional.
“Podemos decir que el cerebro acostumbrado al speedwatching se aburrirá si no recibe los estímulos a velocidad acelerada, volviéndose pasivo. Deja de estar atento, de estar concentrado y simplemente recibe información”, apunta el texto.
Asimismo, manifiesta que esta tendencia puede afectar al desarrollo de capacidades como la retención, la comprensión y la memoria, que son esenciales para el aprendizaje y la madurez cognitiva.
Por este motivo, el artículo exhorta a tener un equilibrio entre el consumo acelerado y el consumo pausado, que favorece una mayor profundización y disfrute de los contenidos.
Agencias Internacionales.